Esta semana cuelgo el post con un poco de retraso. Hemos tenido invitados este fin de semana y casi no he tenido tiempo de hacer la entrada. Lo que si tuve tiempo es de hacer este bizcocho. Es un bizcocho normal, al que se le añade el dulce de leche una vez esta hecha la masa, justo antes de hornear. De esta forma, a pesar de que por el corte, parece un bizcocho marmolado, pero no lo es, ya que el dulce de leche va tal cual,no mezclado con parte de la masa.
Ingredientes:
3 huevos
150 g azúcar
80 ml aceite
80 ml leche
1 sobre levadura
220 g harina
100 g dulce de leche
Elaboración:
Este bizcocho se hace como todos, es decir, bizcocho sencillo.
En primer lugar ponemos los huevos con el azúcar y los montamos bien durante unos 5-7 minutos.
A continuación añadimos el aceite a hilo fino y la leche, sin dejar de batir.
Una vez bien mezclado, añadimos la harina y la levadura tamizada con ayuda de un colar, ya que en verano, al haber mas humedad, está un poco apelmazada.
Una vez tenemos la batida de bizcocho,preparamos un molde de 18 cm, engrasando las paredes y cubriendo el fondo con papel de hornear.
Precalentamos el horno a 170ºC y ponemos la masa en el molde.
Añadimos el dulce de leche en el centro y removemos con ayuda de un tenedor.
Horneamos a 170ºC durante 20 minutos y unos 40 minutos a 140ºC. Es un bizcocho muy húmedo y tarda su tiempo en hornearse, así que, paciencia.
Una vez bien horneado, lo desmoldamos templado y dejamos enfriar antes de adornar.
Ponemos en una bandeja y espolvoreamos de azúcar glas.
A continuación, la vista del corte.
Un bizcocho original y diferente. No tan dulce como su nombre indica pero muy jugoso y apetecible. Probad a meterlo en la nevera y vereis la diferencia.
Hasta la próxima.
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